viernes, 2 de febrero de 2007

El Verdadero Poeta



El verdadero poeta es aquel que se parece a un animal sin sangre, solo lo mantiene vivo su instinto. Lo mantiene vivo aquella naturaleza que busca llenar todas las hojas de un árbol con mentiras y preguntas absurdas, aquel sentimiento intrínseco que transforma la sangre bestial de su amada en armonías de salvación para otras almas.

El verdadero poeta es quien no teme ver correr lástima por los ojos de aquella ingrata, de nadar a oscuras como un ciego que no supo marchar como un militar, y es lo suficientemente fuerte para aguantar el escuchar grotescas historias y averiguar en forma macabra esas verdades corto punzantes.

El verdadero poeta es aquel que le da la bienvenida a los destellos de la más cruda locura, sin discriminación de tiempo o de la casa donde se le permite vivir.

El verdadero poeta es aquel que inventa el más bello texto y tiene la infinita gracia de plasmarlo en su piel como quien raya un boleto de micro, o como quien le inventa una vida multicolor a un vagabundo promedio.

El verdadero poeta es aquel que escribe sin miedo a esas miradas tibias e irreales, a los comentarios inquisidores y mucho menos a las represalias fortuitas, es quien es capaz de beber hasta la última gota de una muerte ajena y siendo tenaz, como el solo, puede respirar sonrisas pasajeras.

Porque el silencio se ha comido hasta la última vida del poeta, sin dejarle salida ni escape, es por eso que su muerte es intangible para el hombre que vive a medias, para el hombre que se hace llamar cuerdo, por el solo hecho de buscar durante toda su vida; Una casa grande, un auto bonito, una esposa sensual y un perro labrador que mueva la cola cuando llegue de la rutina asesina.

Por lo mismo deseo repudiar a todo aquel que alguna vez ha tenido la osadía impertinente de llamarme poeta, yo solo quiero ser alguien capaz de mirar al cielo y poder reírme de Dios, salir los fines de semana a matar ángeles a puñaladas, saber revolcarme en las nubes con todo el desdén alcanzable por un ser humano natural y silvestre, y por último...

¡Poder sentir la brisa del mar entrar por los ojos de esta divina enfermedad llamada vida!.


+ Gracias por el simple hecho de leer.
+ A Chiloé nos vamos! La Ruta de la Papa 2007!
+ Vendo el planeta tierra, con todo lo que trae adentro, y también confecciono poemas a pedido, para las pololas, las mamás y para cualquiera que le gusten las cosas melosas... ¿Qué vale más, la tierra o los poemas?.